Había una vez un perro llamado Max. Max era un perro muy rebelde que siempre se metía en problemas. Un día, Max se escapó de casa y se adentró en el bosque. Mientras exploraba, se encontró con otros animales como un conejito y un pájaro.

Max comenzó a jugar con el conejito y el pájaro. Juntos, saltaron y corrieron por el bosque. Pero luego, se encontraron con un río muy grande. El conejito y el pájaro tenían miedo de cruzarlo, pero Max quería seguir explorando.

Max miró a sus amigos y se dio cuenta de que no podía dejarlos atrás. Entonces, Max se puso su capa de superhéroe y pensó en cómo cruzar el río. Finalmente, encontró un tronco caído y lo usó como puente para que todos pudieran cruzar de manera segura.

Después de cruzar el río, Max y sus amigos siguieron explorando el bosque juntos. Se encontraron con un lindo cervatillo y una familia de osos. Max aprendió que ser valiente y ayudar a los demás es mucho más divertido que causar problemas.