Había una vez un payaso llamado Tristan que vivía en un pequeño circo junto a sus amigos: la bailarina, el oso y el mago. Todos ellos eran muy diferentes pero tenían algo en común, ¡eran grandes amigos!

Un día, el circo tuvo que cerrar debido a una tormenta muy fuerte. Tristan, la bailarina, el oso y el mago se encontraron sin hogar y sin trabajo. Estaban tristes y asustados.

Pero entonces, recordaron lo más importante: su amistad. Decidieron ayudarse mutuamente y buscar un lugar para vivir. Juntos, construyeron una pequeña carpa en el jardín de un buen señor.

Pronto, los vecinos se dieron cuenta del hermoso espectáculo que ofrecían Tristan el payaso, la bailarina, el oso y el mago. El circo volvió a abrir y tuvieron aún más éxito que antes. ¡Todos estaban felices y agradecidos por su amistad!