Había una vez, en un lejano reino, un grupo de princesas muy especiales. Cada una de ellas tenía un peinado único y hermoso. Había una princesa con trenzas doradas, otra con rizos rebeldes y una más con un moño gigante. Pero un día, las princesas se dieron cuenta de que sus peinados estaban desapareciendo.
Las princesas estaban muy preocupadas y no sabían qué hacer. Decidieron buscar al hada madrina para pedirle ayuda. El hada madrina era sabia y siempre tenía soluciones para todo. Cuando las princesas llegaron a su casa, el hada madrina les dijo: '¡No se preocupen, queridas princesas! Tengo una idea para resolver este misterio'.
El hada madrina les dio un frasco lleno de polvo mágico y les dijo: 'Es polvo de estrellas que hará que sus peinados vuelvan a crecer, pero solo si trabajan juntas'. Las princesas se alegraron y se comprometieron a colaborar. Cada noche, antes de dormir, las princesas esparcían el polvo mágico en sus cabezas y hacían un deseo especial.
Después de una semana, los peinados de las princesas comenzaron a crecer de nuevo. Pero esta vez, los peinados eran diferentes. Ahora tenían trenzas entrelazadas, rizos suaves y moños adornados con flores. Las princesas se dieron cuenta de que sus peinados eran aún más hermosos que antes.
Las princesas aprendieron que trabajar juntas y encontrar soluciones creativas podía resolver cualquier problema. A partir de ese día, se convirtieron en las princesas del cabello encantado. Siempre recordaban que la verdadera belleza radica en la forma en que nos cuidamos y ayudamos mutuamente.
Y así, las princesas siguieron viviendo felices y con peinados hermosos para siempre. Fin.
Reflection Questions