Había dos gatitas, una blanca y otra blanca y negra.
Las gatitas eran hermanas y se llamaban Luna y Estrella.
Un día, las gatitas decidieron explorar el bosque cercano a su casa.
Mientras caminaban, encontraron una mariposa amarilla y decidieron seguirla.
La mariposa las llevó a un hermoso lago rodeado de flores de colores.
Luna y Estrella se divirtieron mucho jugando en el lago y persiguiéndose por el campo.
Al caer la tarde, las gatitas regresaron a casa, felices y llenas de aventuras para contar.
Desde ese día, Luna y Estrella siempre exploraban juntas y tenían las mejores aventuras.
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